Es una piedra del chamanismo por excelencia y sagrada, con propiedades muy peculiares que permite almacenar energías de diferentes tipos. Entre sus propiedades esta la piezoeléctrica: recibir, amplificar, transformar, almacenar, focalizar y transferir la energía.
Sus propiedades los hacen aptos para actuar como conductores de energías con el cuerpo humano y, a la vez, servir de canalizadores para alcanzar determinados estados mentales. También se les otorga especial importancia en la curación.
Entre sus propiedades mágicas están: dar poder a sus propietarios, ayudar en determinadas meditaciones, sanar, almacenar energías, activar el tercer ojo.
Los chamanes utilizan cristales de cuarzo en sus trabajos de adivinación. Los cristales de cuarzo, según los chamanes, sirven para recibir y transmitir informaciones mentales. Los mayas ya utilizaban los cristales de cuarzo, así como la corriente cabalística de la edad media. Según el psicólogo Jacobo Grinberg-Zylberbaum, cuando un campo neuronal interactúa con un cristal de cuarzo se incrementa la coherencia del campo y esto hace que su capacidad de interacción con el espacio-tiempo haga lo propio. Esto explica porque un cristal actúa como un mecanismo de recepción y transmisión de contenidos mentales.
Según el color del cuarzo simboliza unas cualidades diferentes, así el cuarzo violeta simboliza las lágrimas de la diosa luna, y daba poder para ver de noche; el cuarzo pardo o negro, tenia el poder de aconsejar sabiduría y proteger de los rayos; el cuarzo amarillo es un símbolo de valentía que se transmite a los guerreros; el cuarzo verde es un símbolo de curación
Fuente: Enciclopedia de los Símbolos Esotéricos Jorge Blaschke
